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Año nuevo, ¿vida nueva?

BOMBEJA AGUSTINET! — Felip Bens


© LaLiga



El nuevo año granota nos ha traído más incertidumbre aún sobre el futuro societario del Llevant UD. La propuesta de Danvila podría ser razonable. El problema es que huele a la legua a venta encubierta. Por las informaciones publicadas, no parece que él tenga músculo financiero para inyectar todo lo que está anunciando. Y aparte hace meses que viene avisando de que no sería suficiente con su propuesta inicial y que haría falta más dinero. ¿A quién y en qué condiciones se le va a vender el club?, es la pregunta que se hacen los levantinos. El actual proceso es complejo, sin duda, con todas las aristas heredadas de quienes no quisieron aprovechar su poder para consolidar la entidad granota sobre bases democráticas y acabaron saliendo por la puerta de atrás. En los próximos meses, mientras el levantinismo se juega el ascenso con la gestión sobre el césped de una de las mejores plantillas de Segunda, Danvila tendrá que atar muchos cabos, salvar situaciones al límite y validar, con un proceder honesto y transparente, un proceso que de ninguna manera debiera cerrarse en falso. Lo que parece obvio es que su principal argumento para eliminar competidores no se va a cumplir: el Llevant no va a ser de los levantinos. Y si me equivoco, seré el primero en aplaudir.


••• Identidad futbolística y cantera. La victoria por 7-0 del juvenil sobre la Real Sociedad y la presencia permanente de perlas de la cantera en la selección que por edad les corresponde, avala el trabajo realizado desde hace muchos años. Sorprende que ni entre el levantinismo ni entre sus propios impulsores se hayan valorado estos éxitos. Más allá de las sensaciones de la grada, que desde siempre –asumámoslo– ha sido mucho más exigente con los de casa que con los de fuera, el Llevant no tiene una identidad futbolística, no cuenta con un proyecto a medio y largo plazo. Así, el espectacular rendimiento de la cantera desde hace años no encaja en la estructura deportiva del club. A pesar del estado de standby en el aspecto societario, urge el diseño de un ambicioso plan que redefina la identidad deportiva del Llevant y permita y contribuya a dar salida al inmenso caudal de talento futbolístico que mana de Buñol.


••• El Queso mecánico de Benito Floro despertó simpatías en Valencia. No es de extrañar: más de 100.000 albaceteños viven en nuestra tierra, la mitad en el cap i casal, mas todos aquellos descendientes que ya nacieron aquí desde hace décadas. A menudo me cuesta entender la arisca rivalidad que desde hace unos años se viene alimentando desde allá, con cierto éxito, como si hubiese querellas pendientes. Hoy volverá a haber una invasión en Orriols, aunque sospecho que muchos, como las otras veces, serán valenciano-manchegos. Confiemos que reine la cordura y que suceda el milagro: que el Llevant comience el año jugando a fútbol con la ambición que no lo ha hecho hasta ahora más que en escasas ocasiones, entre ellas en la ida en el Carlos Belmonte.

—EL «BOMBEJA» EN VALENCIÀ EN YOUTUBE.








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